La Cansaladeta, yacimiento clave del Pleistoceno medio en el noreste peninsular


By Görkem Cenk Yesilova, Josep Maria Vergès y Andreu Ollé / IPHES

Un artículo publicado en la revista Archaeological and Anthropological Sciences confirma que el yacimiento de La Cansaladeta (La Riba, Tarragona) es clave para conocer las poblaciones humanas del valle del río Francolí de hace 400.000 años.

El trabajo, enmarcado en la tesis doctoral que su autor principal, Görkem Cenk Ye?ilova, desarrolla en el Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES-CERCA) y en la Universidad Rovira i Virgili (URV), representa el primer análisis tecnoespacial detallado llevado a cabo en este yacimiento. El estudio forma parte del proyecto de investigación titulado "Evolución paleoambiental y poblamiento prehistórico en las cuencas de los ríos Francolí, Gaià, Siurana y arroyos del Camp de Tarragona", financiado por el Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña.

El trabajo demuestra que el análisis de la distribución espacial de los restos arqueológicos aporta valiosa información, incluso en yacimientos de dimensiones reducidas, siempre y cuando su registro esté muy bien conservado. Y este es el caso del yacimiento de La Cansaladeta, donde los procesos posdeposicionales apenas han alterado la disposición de los restos. Para llegar a esta conclusión, se han analizado las herramientas de piedra de los niveles E y J del yacimiento. Con una superficie excavada que no supera los 8 m², estos conjuntos cuentan con 1.675 y 3.166 elementos respectivamente.

Partiendo del estudio de los remontajes, es decir, de la reconstrucción de secuencias de talla a partir de piezas que encajan entre ellas, se ha estudiado su distribución espacial. Se han podido delimitar concentraciones y cuantificar la densidad de restos mediante herramientas SIG (Sistemas de Información Geográfica). Los elementos de cada una de estas acumulaciones han sido caracterizados tecnológicamente (tipo de roca utilizada, partes de la cadena de fabricación representadas, características tipométricas...), por lo que se han podido reconocer correspondencias entre las diferentes concentraciones, estimar su posible contemporaneidad y, en definitiva, identificar momentos de ocupación y áreas de actividad.

Se han observado características diferentes en cuanto al tipo de remontajes y patrones espaciales entre los niveles E y J. Aunque la escasez y la pobre conservación de los restos faunísticos en ambos niveles limita en cierto modo la interpretación de estas ocupaciones, los resultados obtenidos nos ayudan a reconstruir detalles del comportamiento y de las estrategias de subsistencia de los grupos que habitaron el estrecho de La Riba hace unos 400.000 años. Por lo que se ha podido averiguar, miembros de estas sociedades cazadoras y recolectoras visitaron periódicamente el abrigo de La Cansaladeta, e hicieron estancias relativamente cortas en él, probablemente aprovechando la situación del enclave en medio del estrecho de La Riba como punto de control de los movimientos estacionales de sus presas.

El estudio, en definitiva, aporta datos consistentes para poder interpretar la variabilidad tecnológica y subsistencial en el ámbito de la península Ibérica en un momento crucial, el interglacial conocido como Estadio Isotópico 11 (o MIS11, que va de los 424.000 a los 374.000 años antes del presente). Este período se caracteriza por la presencia de poblamiento humano en enclaves ecológicamente más diversos que en momentos anteriores, y por la emergencia de determinados elementos de orden subsistencial o comportamental (en términos de estrategias de caza, en cuestiones simbólicas o, por ejemplo, en el dominio del fuego) que nos conducirán hacia el mundo de las comunidades neandertales.

Además, el programa de remontajes se está aplicando también de forma intensiva en el resto de niveles (10 en total), ya que uno de los objetivos de dicha tesis es evaluar toda la secuencia de La Cansaladeta, y comparar los resultados con los obtenidos en conjuntos estudiados desde el IPHES-CERCA, como el de TD10 del yacimiento de Gran Dolina (sierra de Atapuerca, Burgos), con una edad similar a la de La Cansaladeta, o en otros más antiguos de la misma cuenca del Francolí, como la Cala 1 del Barranc de la Boella (La Canonja, Tarragona), con una edad cercana al millón de años.

Referencia:

Ye?ilova, G.C., et al. 2021. Is a spatial investigation possible without long-distance refit /conjoin? Application to the MIS 11 lithic assemblage of levels E and J from La Cansaladeta site (Tarragona, Spain). Archaeological and Anthropological Sciences 13, 157. DOI: https://doi.org/10.1007/s12520-021-01384-3