El Día de la Mujer, que se continúa celebrando todos los años el 8 de marzo, nos recuerda que aún estamos lejos de la igualdad entre los dos géneros. El mundo de la investigación no es una excepción y por ello, desde la comisión de igualdad del IPHES-CERCA, estamos trabajando en diferentes acciones contempladas en el Plan de Igualdad del centro para que ámbitos como la visibilización, la equidad, el liderazgo o el desarrollo de la carrera investigadora dejen de ser hándicaps para las mujeres en la arqueología. En nuestro centro hay 32 investigadoras y técnicas de apoyo a la investigación que participan en numerosos proyectos y excavaciones arqueológicas.
A pesar de que, aparentemente, las mujeres lo hacen en igualdad de condiciones, son aún pocas las que los lideran o dirigen. Además, en el caso del trabajo de campo, la participación de las mujeres se ve condicionada, en ocasiones, por distintos factores, como, por ejemplo, cuando se trata de campañas que se desarrollan en países donde existe una fuerte discriminación hacia las mujeres o por la maternidad, que no únicamente implica un paréntesis si no que, en ocasiones, complica la presencia de las investigadoras en campañas largas lejos de casa.
Desde nuestro centro, y en el caso del Proyecto Atapuerca, no obstante, cabe mencionar que las mujeres desarrollan un papel relevante: Marina Mosquera es co-investigadora principal del subproyecto Atapuerca; Rosa Huguet, Isabel Cáceres, Ethel Allué, Paola García-Medrano y Palmira Saladié son responsables de los diferentes yacimientos de la sierra de Atapuerca y Lucía López-Polín, del laboratorio de restauración. Igualmente, el IPHES-CERCA y el proyecto han facilitado la conciliación durante las excavaciones en la sierra de Atapuerca, donde Lucia López-Polín fue una de las primeras en hacerlo y desde el año 2006 sus dos hijas (Marta y Clara) la acompañan en Atapuerca cada verano. Posteriormente se sumaron otras familias, como la de Marta Fontanals con Roc y Josep Maria, Ethel Allué con Matilda y la de Gala Gómez-Merino con Arcadi.
Queda aún mucho por hacer y el camino hacia la igualdad es largo, por lo que hay que seguir trabajando para conseguir una participación plena y en igualdad de condiciones de las mujeres en nuestro día a día, para que el género no sea motivo de discriminación.