“Miguelón, el cráneo número 5 de la Sima de los Huesos, tiene cuello.


By Museo de la Evolución Humana

Cuando se cumplen 30 años del descubrimiento del cráneo fósil más completo del mundo, el Museo de la Evolución Humana ha incorporado la totalidad de su columna cervical, es decir, las siete vértebras cervicales y dos premolares maxilares del “Cráneo número 5” de la Sima de los Huesos de los yacimientos de la sierra de Atapuerca, conocido popularmente como “Miguelón”.

Estas piezas, que proceden del Museo de Burgos, pasan a formar parte de la colección permanente del MEH. Estos fósiles se descubrieron después del hallazgo del propio cráneo y han sido estudiados y restaurados desde entonces. El proceso de excavación, limpieza y reconstrucción ha durado varios años.

El “Cráneo 5” es el cráneo mejor conservado del mundo de una especie fósil encontrado hasta la fecha y con la incorporación de las vértebras cervicales la importancia del hallazgo es aún mayor, ya que no hay ningún cráneo con vertebras en el registro fósil mundial. Para poder exhibir el cráneo conjuntamente con las vértebras han estado trabajando en un soporte adecuado para que sea admirado por los visitantes.

El espacio del Museo de la Evolución Humana dedicado a la Sima de los Huesos se ha ido completando desde la inauguración del Museo en 2010. Además del “Cráneo 5”, en dicho espacio se exhiben otros fósiles originales -los más completos del mundo del Pleistoceno medio- encontrados en la Sima de los Huesos como “La pelvis Elvis”, “La mano X”, así como un húmero y una tibia completas. En 2013 se incorporó un pie derecho de un preneandertal de la Sima de los Huesos con una antigüedad de medio millón de años, hecho que constituyó además un homenaje a la selección española de fútbol dirigida por Vicente del Bosque, que consiguió dos Copas de Europa y una Copa del Mundo. El pie, llamado “Vicente del Bosque”, consta de todos los huesos del tobillo, del talón y del empeine.

En 2016 se incorporó el “Cráneo 4”, también de un homínido preneandertal que fue descubierto en julio de 1992 en la Sima de los Huesos junto con los cráneos 5 y 6 y con una antigüedad de 430.000 años. Se trata de un cráneo al que le falta la cara. Posee un gran volumen encefálico para su antigüedad y es ancho y de bóveda baja. Además, presenta un reborde óseo sobre las órbitas o torus supraorbitario que recuerda al de los neandertales, posteriores en el tiempo. El yacimiento de la Sima de los Huesos en Atapuerca resulta capital para conocer la evolución del tamaño, la forma y las proporciones del género Homo.

Asimismo, también en 2016 se incorporó a la exposición permanente del MEH un cráneo de oso de más de 400.000 años. La Sima de los Huesos es, sobre todo, la “Sima de los Osos”, ya que a lo largo del tiempo cayeron a ella muchos osos que hibernaban en la Cueva Mayor de Atapuerca. Gracias a la abundancia de fósiles de todas las partes esqueléticas se han podido llegar a conocer y a establecer los rasgos distintivos de la especie Ursus deningeri, la especie de oso que habitaba en el Pleistoceno medio en la sierra de Atapuerca.