Febrero 2019
La red de senderos botánicos que enlazan los yacimientos que se encuentran en Trinchera del Ferrocarril (Sima del Elefante, Galería y Gran Dolina) con Cueva Fantasma, Cueva del Silo y Cueva Mayor ha concluido con la terminación del denominado “camino de las rozas”, que une Cueva Mayor con Cueva Fantasma. En total, el recorrido consta de tres kilómetros aproximadamente y se abrirá al público en Semana Santa. Gracias a este proyecto de socialización, los visitantes podrán caminar entre los yacimientos de la sierra de Atapuerca y observar el entramado natural que los conecta de forma circular.
Esta actuación se enmarca en el convenio de colaboración firmado en 2016 y renovado anualmente por la Fundación Caja de Burgos, la Obra Social ‘la Caixa’ y la Fundación Atapuerca.
En esta última fase, que se presentó el pasado 26 de febrero, se ha instalado una escalera en Cueva del Silo, la señalización de puntos de interés y mejoras en el sendero que conecta la Cueva del Silo con Cueva Fantasma. Además, encima de estos dos yacimientos, se han emplazado dos puntos de observación. Se trata de dos lugares estratégicos para observar el paisaje y la fauna, así como para ser empleados en visitas guiadas y ampliar explicaciones a grupos específicos. También se ha mejorado el acceso a la Cueva del Silo desde el punto de observación superior, con aporte de zahorra, compactado posterior y adecuación de escaleras con puntos de descanso.
Por otro lado, se ha recuperado el talud de Cueva Fantasma, con aporte de tierra vegetal y plantación de endrinos, rosales silvestres y aliagas, todas ellas especies de la zona. Asimismo, se han señalizado puntos de observación y lugares concretos de interés en todo el tramo del camino de las rozas, es decir, desde Cueva Fantasma hasta Cueva Mayor, pasando por la Cueva del Silo. Además, se han colocado dos mesas simples con información sobre la geología y la evolución del paisaje de Cueva del Silo, atriles con datos históricos, paleontológicos y faunísticos, dos paneles verticales de localización y un mapa de senderos para facilitar la orientación y la elección de recorridos. También se han incorporado señales botánicas y de dirección.
Los contenidos de las mesas y atriles interpretativos han sido proporcionados por Ana Isabel Ortega, miembro del Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA), y adaptados para el público general por Miguel Ángel Pinto, director de las Aulas de Medio Ambiente de la Fundación Caja de Burgos. Todo este trabajo ha sido supervisado por Eudald Carbonell, codirector de los yacimientos de la sierra de Atapuerca y vicepresidente de la Fundación Atapuerca.
Todas las acciones se están llevando a cabo respetando la seguridad de los yacimientos. Para ello, en las próximas semanas, se instalarán dos puertas para vehículos de servicio y una puerta de acceso peatonal en Cueva Fantasma y Cueva del Silo, que se podrán abrir y cerrar en función de las necesidades de servicio. En la última fase de este ambicioso proyecto, se completará la parte del sendero que conecta Cueva Mayor con el complejo de Cueva Mirador y con los nuevos yacimientos de Paredeja y Cueva Chiquita.