40 años de la presencia de los conservadores-restauradores de patrimonio arqueológico en el Equipo de Investigación de Atapuerca
Ficha:
Desde hace años, hay equipos de conservación-restauración consolidados en los tres centros que lideran el proyecto de investigación en Atapuerca. Desde el Centro Mixto UCM-IXCIII se ocupan de los yacimientos de Cueva Mayor: Sima de los Huesos, Galería de Estatuas, Estatuas exterior y Portalón. En los yacimientos de Gran Dolina, Galería, Sima del Elefante y Cueva Fantasma, trabajan durante la campaña los equipos del CENIEH y del IPHES. Tras la campaña, continúa el trabajo en cada uno de los centros y, finalmente, el material vuelve a Burgos, donde se reúne toda la colección.
Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH)
Pilar Fernández Colón / CENIEH
En 2006 se inauguró en Burgos el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), una infraestructura científica y técnica singular abierta al uso de la comunidad internacional. Entre sus objetivos institucionales, adquirió la responsabilidad de la conservación, restauración, gestión y registro de la colección arqueo-paleontológica de los yacimientos de la sierra de Atapuerca (Burgos). Para cumplir con este compromiso, se creó el Laboratorio de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Arqueológicos y Paleontológicos. El laboratorio cuenta en la actualidad con tres conservadoras-restauradoras especializadas en arqueología, dos en plantilla y una con contrato temporal. Su personal lo ha diseñado y equipado para que se adapte a los procesos de conservación que requiere el patrimonio cultural que llega a sus instalaciones. Y también ha diseñado y gestiona, desde la conservación preventiva, tres salas de depósito que albergan cerca de 200 mil piezas. Cabe mencionar la denominada Sala Acorazada, donde se custodia la colección de humanos, fauna y lítica con mayor valor científico y cultural, y que presenta medidas de protección excepcionales bajo las especificaciones técnicas del grado de acceso y seguridad VII para museos.
El laboratorio define sus líneas metodológicas de trabajo bajo los criterios internacionales profesionales (respeto al original, mínima intervención, reversibilidad y unicidad), y atendiendo al valor científico de la colección: la calidad de la intervención de conservación repercute en la calidad final de las investigaciones. Su objetivo es, por tanto, encontrar el equilibrio entre la necesaria salvaguarda en el tiempo del patrimonio y su necesario estudio para el desarrollo del conocimiento en el ámbito de la evolución humana.
Centro Mixto Universidad Complutense de Madrid – Instituto de Salud Carlos III de Evolución y Comportamiento Humanao(UCM-ISCIII)
Mª Cruz Ortega-Martínez / UCM-ISCIII
El equipo de investigación de Madrid, dirigido por Juan Luis Arsuaga, cuenta con un laboratorio de restauración en el que trabajan profesionales de restauración desde 1998. Durante estos años, han podido conocer en profundidad el estado de conservación de la extensa colección de los más de 7.000 fragmentos humanos de la Sima de los Huesos y de los productos aplicados desde 1976.
Aunque la mayoría de los materiales arqueo-paleontológicos recuperados en los yacimientos de Cueva Mayor se encuentran en muy buen estado y no necesitan tratamientos, hay casos especiales, como el del sílex del yacimiento de Estatuas Exterior, que se encuentra tan alterado que necesita consolidación in situ y restauración en el laboratorio. Los fósiles de la Sima de los Huesos, aparecen en fragmentos aislados y con la estructura interna muy debilitada, por lo que deben ser tratados en el laboratorio de campo con tratamientos de limpieza y consolidación, para evitar que se deterioren al ser manipulados.
En el laboratorio del centro de investigación se sigue con los trabajos de conservación-restauración. Por las características particulares del yacimiento de la Sima de los Huesos, la colección está en continua revisión. Además de controlar el estado de conservación de los productos aplicados a lo largo del tiempo, también se realizan adhesiones de los fragmentos aislados y reconstrucciones para formar huesos completos. Hay cráneos que se deben despegar, algunos de ellos o en su totalidad, para unir los nuevos fragmentos. ¡Hay fósiles que se han remontado a lo largo de más de 30 años!
Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) en Tarragona
Lucía López-Polín / IPHES-CERCA
En el núcleo de investigación de Tarragona liderado por Eudald Carbonell ha existido desde la década de 1990 un laboratorio de restauración. Con el tiempo ha ganado eficiencia y, actualmente, restauran muchos restos, durante la campaña y en el laboratorio. El equipo investigador dispone así de artefactos líticos y de fósiles limpios y estables, listos para estudiar. Este trabajo lo hace un equipo, algunas personas trabajan solo temporalmente, también se suman al trabajo estudiantes o recién titulados en prácticas. Este tránsito de gente, además de ser una ayuda, sirve para compartir el conocimiento empírico, el que se ha generado tratando centenares de restos faunísticos, de fósiles homininos y de artefactos de piedra.
En el IPHES también se investiga para evaluar los tratamientos que se hacen, para detectar sus puntos débiles y proponer mejoras. Se han publicado sobre criterios de intervención para materiales pleistocenos, han descrito la restauración de los fósiles de Homo antecessor y avanzado en el conocimiento de productos consolidantes para el muy deteriorado sílex de Atapuerca. Investigadores predoctorales están actualmente evaluando técnicas de limpieza y de consolidación, tratamientos habituales para el material de estos yacimientos.
Nacieron de una necesidad, la de salvar el material para permitir su estudio. Sumando años de práctica e investigación, han evolucionado, de manera que ahora también están en condiciones de proponer cómo restaurar este tipo de registro material, algo necesario para interpretar mejor el pasado, pero también para traspasar el material en buenas condiciones a las generaciones del futuro.