Un equipo del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES), liderado por Manuel Vaquero y Susana Alonso, ha descubierto una mandíbula de un humano infantil durante las excavaciones que se han llevado a cabo en el yacimiento del Molí del Salt (Tarragona).
Este yacimiento, que lleva excavándose veintitrés años, presenta una secuencia estratigráfica con numerosas ocupaciones humanas y campamentos del Paleolítico superior final y el tránsito al Holoceno, con dataciones entre 9.000 y 15.000 años antes del presente.
La mandíbula de un niño o una niña, de entre 4 y 5 años de edad, ha aparecido en los niveles inferiores de hace 15.000 años, correspondientes al Magdaleniense. Los restos óseos aparecieron en un área en la que afloran numerosos bloques de piedra planos, que podrían constituir un enterramiento. Se da la circunstancia de que este resto humano es el más antiguo de la Cataluña meridional y uno de los pocos que existen en estas cronologías en toda la Península Ibérica.